En octubre del 2008, hace 2 años y un mes exactamente, se me ocurrió crear un blog. La intención era aprender a usar el código de HTML, lenguaje muy usado en la programación informática y de muchos sitios web.
De formato muy simple, rápido y dinámico, el blog me dio la oportunidad de comenzar a escribir, de decir lo que pensaba acerca de cosas cotidianas, muchas veces triviales, algunas personales y otras no tanto.
Me empezó a gustar este formato y de a poco “Quién me escondió los zapatos” fue tomando forma, con más gadgets y secciones interactivas. Finalmente, hace un año, incluí la radio con el fin único de escuchar la música que a mí me gusta. Al comienzo, sólo canciones, luego mi voz presentándolos y ahora, es mi vicio.
No hay vanidad aquí, porque nunca ha sido mi intención tener seguidores o “fans”, hago esto porque me gusta y punto. Más o menos visitas o comentarios, da igual. Esta no es más que una vía de escape, un descanso y una pausa en mi día.
Pero ayer, recibí una invitación de facebook de Anita, desde Santiago, quien me felicita por la radio y me dice que incluso se la ha recomendado a varios amigos más, los que también la encuentran buena y la escuchan. Anita no es la única, porque cada día desde Linares entra Jany a escuchar las nuevas de la radio. Desde Santiago viene con frecuencia Luis. En Concepción está Rodrigo y en Alto Jahuel me escucha José Luis y Yoshy. Incluso desde el extranjero he tenido la visita de Joel Kaning y Jens Gad, músicos de peso mundial y quienes admiro mucho, así que siempre hay alguien escuchando lo que programo.
Lo anterior me llevó a revisar el contador de visitas, y desde que lo instalé hace como un año y medio, el conteo dice que 26590 personas han visitado mi página, cifra que sube con el paso de las horas. Las otras estadísticas muestran que 2500 personas han usado parte de lo que publico como referencia para sus propios sitios, copiando y pegando mis textos, además del hecho de que personas de nacionalidad peruana, boliviana, estadounidense y especialmente española, son las que más visitan el blog.
No todos comentan, no todos entran a escuchar la radio, pero el tráfico del blog no para en todo el día.
Si este rincón del ciberespacio, que nació como un medio de aprendizaje laboral para mí y que se ha convertido en un hobbie y en un gusto personal, logra entretener, emocionar e informar a alguien más, tanto mejor.
Anita hizo que me sorprendiera hoy, pero mejor aún, logró sacarme una sonrisa.
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